LERDO, Durango.- Ante la rechifla que recibieron los gobernadores priistas de Durango, Esteban Villegas, y de Coahuila, Manolo Jiménez Salinas, el presidente Andrés Manuel López Obrador salió en su defensa este domingo, subrayando que el proceso electoral ya pasó y llamando a la unidad.
Durante la supervisión del programa “Agua para La Laguna”, López Obrador enfatizó que los partidos políticos son solo una parte, mientras que el gobierno es para todo el pueblo.
El evento se llevó a cabo en la Unidad Deportiva Ciudad Lerdo, donde varios asistentes expresaron su rechazo a los gobernadores priistas y al presidente municipal, Homero Martínez Cabrera, también del PRI, gritando “¡Fuera el PRI, fuera el PRI!”.
La tensión fue evidente, pero el presidente buscó calmar los ánimos con un llamado a la unidad y cooperación entre todos los niveles de gobierno.
Todos juntos. Presidente municipal. Miren al presidente municipal de Lerdo. Ya pasó la elección ¿de acuerdo? Ahora, unidad. Los partidos, como su nombre lo indica, es una parte; gobierno es todo”, expresó López Obrador.
Enfoque en el proyecto
El presidente también aprovechó la ocasión para resaltar la importancia del programa “Agua para La Laguna”, un proyecto clave para la región.
La iniciativa busca mejorar el acceso al agua potable, beneficiando a miles de habitantes.
López Obrador instó a los gobernadores y a los asistentes a centrarse en los beneficios de este programa y en la colaboración para su éxito.
La reciente elección había dejado huellas de división entre los ciudadanos, reflejadas en las rechiflas y gritos durante el evento. Sin embargo, el presidente hizo hincapié en que ya era momento de superar esas divisiones y unir esfuerzos en beneficio de todos. Reiteró que el gobierno debe ser una entidad inclusiva y representativa de todos los ciudadanos, independientemente de sus afiliaciones políticas.
Ante esto, mientras algunos parecían receptivos al mensaje del presidente, otros mantenían su postura crítica hacia los gobernadores priistas.