La apicultura mexicana enfrenta una crisis sin precedentes debido a la entrada al mercado nacional de miel importada de China. Este producto, que según denuncian los productores locales, está rebajado con jarabe de azúcar, ha generado una competencia desleal que pone en peligro la industria nacional.
Los apicultores mexicanos destacan que la miel china carece de las propiedades medicinales que caracterizan a la miel auténtica. “La miel mexicana es cien por ciento pura, mientras que lo que se está vendiendo de China no es más que un jarabe de azúcar”, denunció Adelita San Vicente Tello, directora general de Recursos Naturales y Bioseguridad de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
El bajo costo de la miel china ha capturado un 25% del mercado nacional, desplazando a los productores locales que no pueden competir en precio sin sacrificar la calidad. A esto se suma una sequía severa que ha reducido la producción de miel en varias regiones del país, agravando la situación de los apicultores.
San Vicente Tello advirtió que la miel china “de alguna manera ha logrado evadir los controles de calidad”, sugiriendo la necesidad de una mayor vigilancia y regulación por parte de las autoridades para proteger tanto a los consumidores como a los productores locales.
Ante esta problemática, los apicultores han solicitado la intervención del Gobierno para que implemente medidas que detengan la importación de miel adulterada y apoye a la industria nacional, que se encuentra en una situación crítica.
La apicultura mexicana se encuentra en una encrucijada, con la competencia desleal de la miel china y las adversidades climáticas amenazando su supervivencia. La intervención gubernamental y la concienciación del consumidor sobre la calidad de la miel que adquiere son esenciales para preservar esta tradición milenaria que no solo es fuente de empleo, sino también de salud y cultura.