Una jornada que buscaba generar conciencia y apoyo terminó en caos y violencia cuando un hombre arrojó un cóctel molotov contra un grupo de personas que participaban en una caminata pacífica en Pearl Street, en pleno centro de Boulder. El evento, parte de la serie “Run for Their Lives”, fue interrumpido abruptamente por el ataque que dejó varios heridos, entre ellos una mujer con quemaduras graves. Niños presentes también estuvieron en riesgo directo.
El hecho ocurrió alrededor del mediodía, mientras decenas de personas marchaban en solidaridad con rehenes israelíes aún retenidos en Gaza. Testigos relataron escenas de pánico, gritos y una rápida respuesta de socorristas, que lograron contener las llamas y evacuar a los heridos.
El atacante, descrito como un hombre sin camisa que actuó de manera deliberada, fue detenido en el lugar por la policía local. La identidad del sospechoso no ha sido revelada, pero fuentes oficiales confirmaron que está bajo custodia y enfrentará cargos federales. El FBI calificó el ataque como un “acto selectivo de violencia con posible motivación de odio”.
“Es profundamente perturbador que alguien ataque a una comunidad que se manifestaba de manera pacífica, incluyendo a familias con niños”, declaró el gobernador de Colorado, Jared Polis, quien condenó el hecho y prometió apoyo total a las víctimas.
La comunidad de Boulder, conocida por su diversidad y compromiso con los derechos civiles, se encuentra conmocionada por el incidente. Organizaciones judías locales han convocado a una vigilia para esta noche en honor a los heridos y como acto de rechazo al odio.
Las autoridades continúan investigando si el agresor actuó solo y si tenía vínculos con grupos extremistas. Mientras tanto, la seguridad ha sido reforzada en la zona, y los organizadores del evento han reiterado su compromiso de seguir marchando por la paz y la libertad.