Un consumidor se llevó una inesperada sorpresa al encontrarse con una pizzería muy similar al concepto de Little Caesars.
El 80% de los mexicanos que consumen piratería la compran en tiendas físicas o en línea. La piratería incentiva la producción de contenido de baja calidad.
En México, los servicios de alimentos y bebidas aportaron aproximadamente 944 mil millones de pesos mexicanos al producto interno bruto del país en 2022, según refiere Statista.
Un usuario compartió una experiencia inusual: el descubrimiento de una réplica casi perfecta de la famosa cadena de pizzas Little Caesars, esta imitación, bajo el nombre de “Big Jimmy’s Pizza”, no solo reproducía el aspecto visual y el concepto de la marca original, sino que también ofrece precios más bajos.
Y es que la piratería de marcas reconocidas es un fenómeno que afecta a muchas empresas en todo el mundo.
Este problema se manifiesta cuando productos falsificados o imitaciones de baja calidad son vendidos bajo el nombre y la reputación de una marca legítima y reconocida.
En este caso, piratearon una de las marcas de consumo con mayor demanda en el mercado, pues Little Caesars se ha posicionado como una de las cadenas de pizza favoritas entre los mexicanos y desde su llegada al país se ha podido observar el rápido crecimiento que tuvieron en el sector del fast food.
Y es que la marca se ha ganado una buena reputación al ofrecer pizzas asequibles sin sacrificar el sabor, lo que ha generado un interés creciente sobre la rentabilidad de este modelo de negocio.
Consumidor se lleva sorpresa al encontrar un Little Caesars pirata El usuario llamado @chuchito_garrido compartió recientemente en redes sociales cómo luce una tienda que imita a la famosa cadena de pizzas Little Caesars.
Sin embargo, lo que encontró fue una sorpresa: una réplica casi idéntica con el nombre de “Big Jimmy’s Pizza”. Desde el color y el concepto hasta los precios más bajos, todo parecía una versión alternativa de la reconocida marca.
El establecimiento incluso contaba con un personaje similar al de Little Caesars y hasta ofrecía sus famosos panecillos. Incluso el eslogan sugería una similitud con la marca original.
A pesar de que el consumidor tenía expectativas moderadas debido a la imitación, sorprendentemente encontró que el sabor era aceptable, aunque no alcanzaba la excelencia.
El lugar se encuentra ubicado en Popotla, CDMX, una zona que parece atraer a consumidores en busca de precios bajos.
Esta situación plantea interrogantes sobre la originalidad de las marcas y la protección de los derechos de propiedad intelectual en el mercado de consumo.
Algunos comentarios que destacan: @Salvador Gomez: “PERFECTO así se pone las pilas little Caesars ya que últimamente salen bien feas sus pizzas y frías”.
@Kaizen Ramón Oscar: “yo vivo por ahí y siempre tienen gente yo la probé y está buena. te atienden excelente. no como en el otro lugar”.
@Eric Gomez Mahome: “Pues ojalá tenga éxito porque @Little Caesars ya te obliga a comprar la más cara para que te atiendan rápido y su pizza tradicional tarda 30min”.
Los productos piratas son algo común, especialmente en las ventas ambulantes, un caso similar es el el que captó un usuario llamado @tonyaangeelthiago quien compartió en su cuenta de TikTok la curiosa evidencia en la que se observa que un par de hombres en Plaza Mesones que están etiquetando productos con la popular marca Pritt, lo que demuestra que los artículos no son auténticos,