¡Felices fiestas a los amantes de dormir! Hoy es el Día Mundial del Sueño y si a ti, como a Dakota Johnson o TINI, te encanta acomodarte en tu cama y perderte entre las almohadas y las cobijas durante horas, esta es la ocasión perfecta para adentrarte un poco más en la importancia del sueño en tu salud física y mental.
¿Por qué se celebra el Día Mundial del Sueño?
La organización World Sleep Society (WCC) nació en 2016 como un proyecto conjunto entre la World Sleep Federation (WSF) y la World Association of Sleep Medicine (WASM). Entre sus principales iniciativas fue consolidar desde el 2008 el 15 de marzo como el Día Mundial del Sueño con el objetivo de poner de manifiesto la importancia de dormir bien en la salud y el bienestar de las personas.
La temática de este año es Equidad en el sueño para la salud mundial, ya que persisten las diferencias en la salud del sueño entre las poblaciones de todo el mundo, lo que crea cargas adicionales y refuerza las desigualdades de salubridad.
¿Por qué es importante dormir bien para tu salud mental?
Según Claudia Aguirre, neurocientífica de la Universidad de California, conforme avanza el día, nuestro cuerpo produce sustancias tóxicas como residuos de su trabajo para cumplir con sus funciones. Durante las horas de descanso es cuando se encarga de depurar el cerebro de todas estas toxinas, de ahí la importancia de que tengamos un sueño reparador. Asimismo, durante este proceso, el cuerpo regula todos los sistemas, desde el hormonal, hasta el metabólico, para empezar el nuevo día sanamente.
De lo contrario, las sustancias dañinas se quedan estancadas en nuestro cuerpo y los diferentes sistemas se mantienen cada vez más lejos de su punto de equilibrio. A largo plazo, esto puede provocar enfermedades graves, como el Alzheimer o trastornos del sueño.
Además, según Pilar Durán Hernández, profesora de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México, “permanecer despiertos por tiempos prolongados disminuye la secreción de melatonina (hormona que regula el ciclo del sueño), y aumentan los niveles de cortisol (hormona del estrés)”.
Por si fuera poco, llevar un horario de descanso irregular afecta al ciclo circadiano de sueño (dormir en la noche y estar despierto durante el día), lo que, a su vez, altera la alimentación y el metabolismo. Así que, no dormir bien también puede desencadenar enfermedades metabólicas, como la diabetes.
¿Cómo tener una buena higiene de sueño?
Lo primero que debes saber es que, a pesar de que el horario para dormir es común en todo el mundo, no todas las personas pueden dormir igual ni necesitan las mismas horas de sueño para descansar correctamente.
En honor al Día Mundial del Sueño, aquí te dejamos seis consejos generales para mantener una buena higiene del sueño que puedes adaptar como mejor te convenga a tu rutina de descanso.
Establece un horario de sueño (y trata de cumplirlo lo más posible, incluso en vacaciones)
Acomoda tu espacio para que esté completamente oscuro y templado
Sigue una rutina de noche que te permita relajarte al menos 30 minutos antes de irte a dormir
Prepara tus cenas con ingredientes fáciles de digerir y no estimulantes
No utilices dispositivos de luz azul ni hagas actividades muy enérgicas
Viste ropa cómoda para dormir (o no uses, si lo prefieres)
¿Cómo saber si duermo bien?
La doctora Colleen Carley psicóloga del Ryerson University Sleep Lab recomienda hacerte tres preguntas clave para determinar si, gracias o pese a tu rutina de sueño, normalmente descansas lo suficiente:
¿Me siento descansada a lo largo del día?
¿Generalmente duermo toda la noche sin distracciones? O si me despierto, ¿puedo volver a dormir con facilidad?
¿Puedo terminar mi día sin quedarme dormida de manera involuntaria?
Si tu respuesta a todas fue “sí”, ¡felicidades, vas por buen camino! Por el contrario, si respondiste que no a todas, es momento de hacer cambios para bien en tu rutina de descanso diario.