La diabetes tipo 1 se caracteriza por una falta absoluta de insulina producto de la destrucción de las estructuras de cúmulos pancreáticos, mientras que la diabetes tipo 2 es conocida por el alto nivel de azúcar en sangre enmarcado en una resistencia a la insulina y por consiguiente una falta considerable de ésta última. Para combatir este tipo de enfermedad, médicos y especialistas recomiendan incluir en la dieta tres bebidas que reducen los niveles de azúcar en sangre.
La diabetes tipo 2 afecta la forma en la que el organismo transforma los alimentos en energía, ya que se descomponen en glucosa y se liberan en el torrente sanguíneo. Para evitar complicaciones referida a la diabetes, doctores sugieren evitar el colesterol y comidas fritas y grasosas. En consecuencia, los médicos explican que si queremos evitar esta patología es necesaria una buena alimentación y consumir un complemento centrado en dos infusiones y un fermento.
Investigadores le suministraron té negro a un grupo de roedores, comprobando que esta bebida ayuda a la diabetes tipo 2. La infusión repercutía en la insulina y reducía los niveles de azúcar en sangre. “El té puede ser un medio simple y económico de prevenir o retrasar la diabetes humana y asegurar las complicaciones. Es económico, no es tóxico y es placentero”, afirmaron los eruditos en el Jorunal of Africultural and Food Chemistry.
Por su parte, el té verde también cumple un rol esencial en lo que a diabetes respecta. Esta bebida disminuye los niveles de glucosa e insulina en ayunas. Además los investigadores descubrieron que el proceso antioxidante de polifenoles y polisacáridos ayudan a controlar la glucosa en sangre.
Finalmente el vinagre de sidra de manzana mejora la sensibilidad a la insulina luego de que la persona que padece diabetes tipo 2 come un alimento rico en carbohidratos. La investigación, realizada por la Asociación Estadounidense de Diabetes, explica después de tomar el fermento, se reducen los niveles de glucosa e insulina luego de las comidas.