Dámaso López Serrano, alias “El Mini-Lic”, se presentó esta mañana ante una corte federal en el estado de Virginia, donde se declaró culpable de nuevos cargos relacionados con el tráfico de fentanilo y firmó un nuevo acuerdo de cooperación con la fiscalía de los Estados Unidos.
Fuentes judiciales confirmaron que López Serrano, hijo de Dámaso López Núñez “El Licenciado” —excolaborador cercano de Joaquín “El Chapo” Guzmán—, enfrenta una nueva etapa legal en su historial criminal tras haber violado las condiciones de su libertad supervisada.
El FBI informó sobre su detención reciente en Virginia, tras ser acusado de participar en una conspiración para distribuir más de 400 gramos de fentanilo, un cargo federal grave que podría significar una condena prolongada. La acusación se produce a pesar de que “El Mini-Lic” ya había cooperado con las autoridades estadounidenses en 2017, lo que le permitió reducir su condena y obtener la libertad en 2022 bajo estrictas condiciones.
López Serrano fue una figura clave en las investigaciones contra el Cártel de Sinaloa, fungiendo como testigo protegido y proporcionando información sensible que fortaleció casos contra altos mandos del narcotráfico. Sin embargo, su reciente reincidencia ha puesto en duda su credibilidad como colaborador judicial.
En México, la Fiscalía General de la República (FGR) ha reiterado su intención de solicitar la extradición de López Serrano, quien es señalado como presunto autor intelectual del asesinato del periodista Javier Valdez Cárdenas, ocurrido en 2017 en Culiacán, Sinaloa.
El caso permanece abierto tanto en México como en Estados Unidos, y se espera que en las próximas semanas se definan las consecuencias legales de esta nueva declaración de culpabilidad, así como el alcance del nuevo acuerdo de cooperación firmado por el narcotraficante.