En un fallo que podría redefinir la política migratoria de Estados Unidos, el juez federal Brian Murphy impidió al presidente Donald Trump y a su gabinete ejecutar deportaciones de migrantes a terceros países sin ofrecerles un debido proceso legal. La decisión surge tras las crecientes denuncias sobre expulsiones rápidas y sin aviso previo, incluso en casos donde los migrantes enfrentan riesgos graves de persecución, tortura o muerte.
Murphy advirtió que el gobierno de Trump “aplicó y seguirá aplicando la supuesta política de expulsar a extranjeros a terceros países sin previo aviso ni oportunidad de ser escuchados sobre reclamos basados en el miedo”. En su fallo, recogido por ABC News, el magistrado denunció que la administración permitió que personas fueran deportadas a lugares peligrosos sin siquiera poder advertir a las autoridades del peligro que enfrentan.
“Esta práctica viola principios básicos de justicia”, señaló Murphy, quien además calificó las consecuencias de esta política como “daño irreparable”, al exponer a los migrantes a escenarios de persecución o muerte sin posibilidad de defensa.
El fallo obliga ahora a la Casa Blanca a notificar por escrito a los migrantes antes de enviarlos a un tercer país y garantizarles una “oportunidad significativa” para expresar sus temores y solicitar la reapertura de sus casos. Se establece además un plazo mínimo de 15 días para que estas personas puedan apelar su deportación.
Esta resolución llega poco después de que el expresidente Trump apelara a la Ley de Enemigos Extranjeros para deportar sin juicio a presuntos pandilleros venezolanos hacia el CECOT, la megacárcel de El Salvador. La maniobra generó fuertes críticas de organizaciones de derechos humanos por la falta de transparencia y garantías legales.
El fallo de Murphy podría marcar un punto de inflexión en la forma en que se gestionan las deportaciones en EE.UU., imponiendo límites claros a la actuación del Ejecutivo y recordando que incluso en materia migratoria, el respeto al debido proceso no es negociable.