El fenómeno está sucediendo ahora mismo, en las profundidades del Tíbet. A causa de la intensa actividad tectónica en las entrañas de nuestro planeta, la Placa de la India podría haberse fracturado. Esto podría generar, de acuerdo con un equipo de investigadores de China y Estados Unidos, que la corteza terrestre se divida en dos justo debajo de esta zona. Esto es lo que sabemos.
El hecho de que la corteza terrestre se esté partiendo no es novedad. Por el contrario, es evidencia de un proceso geológico de miles de millones de años, natural en nuestro planeta. A este fenómeno se le conoce como ‘desplazamiento de las placas tectónicas’ que, según la Universidad de Hawai’i, es consecuencia de que “cada placa tectónica flota libremente y puede moverse de forma independiente”.
Cuando las fallas entre las placas tectónicas se deslizan o chocan entre sí, explica la institución, sobre la superficie de la Tierra suceden terremotos o aparecen volcanes. Este fenómeno se ha manifestado desde hace millones de años, y seguirá ocurriendo mientras el manto inferior del planeta, compuesto de magma y rocas fundidas, permita que las placas se muevan.
El mismo Himalaya es producto de este movimiento profundo, ya que esta cadena montañosa está justo por debajo de la Placa de la India. De hecho, ha estado en movimiento desde sus orígenes, hace 140 millones de años.
La corteza terrestre está en un proceso de fractura perpetua
A partir de un receptor de ondas S 3D, el equipo de investigadores detectó una deformación en esta zona, que sugiere que la corteza terrestre se podría dividir en dos:
“Nuestras funciones de receptor de ondas S 3D revelan recientemente un desgarro o deformación orógena perpendicular de la Placa India”, escriben los autores para ESS Open Archive. Según sus cálculos, estos movimientos provocaron que parte de la placa india se encuentre justo debajo del Tíbet.
No sólo eso. Los geólogos piensan que “en concordancia con las anomalías isotópicas del helio y la sismicidad profunda”, podría ser “que la Placa India en subducción esté deformada o rota”. Normalmente, estas fracturas en las placas tectónicas se dan de manera vertical. Sin embargo, explican los autores, ésta parece ser horizontal.
Este hallazgo ha alzado preguntas sobre si la actividad sísmica en el Tíbet podría dispararse. De acuerdo con Simon Klemperer, geofísico de la Universidad de Standford que lideró el estudio, es muy probable que así sea. Especialmente, porque quedó una zona muy vulnerable en la placa india. Sin embargo, el especialista enfatiza que el vínculo entre los terremotos y este fenómeno es aún incierto.
El territorio mexicano descansa sobre 5 placas tectónicas importantes: Caribe, Pacífico, Norteamérica, Rivera y Cocos, según los registros del Servicio Sismológico Nacional. La orografía de nuestro país es evidencia del choque y deslizamiento de estos inmesos pedazos de material subterráneo. Por ello, también, el centro y sureste del país se caracterizan por una intensa actividad sísmia, y están colmados de volcanes.
Aunque la convergencia entre tantas placas es considerable, en ninguna de ellas figura la placa india. Aunque todas las placas tectónicas están conectadas de una forma u otra, el hecho de que la placa india se encuentre a 24 mil kilómetros de México mitiga el efecto de sus fenómenos en el territorio. Por lo cual, este evento geológico difícilmente tendrá consecuencias en el país —suficiente tenemos con la actividad telúrica así como está.