La senadora panista Lilly Téllez arremetió contra su colega Andrea Chávez, a quien acusó de presunto enriquecimiento ilícito, tráfico de influencias y peculado. Sus declaraciones surgieron tras la difusión de una investigación que señala que la morenista habría promovido su imagen en Chihuahua utilizando unidades médicas móviles propiedad de un contratista vinculado a Adán Augusto López Hernández, coordinador de Morena en el Senado.
Durante una conferencia de prensa, Téllez cuestionó la falta de una investigación contra Chávez y denunció que el caso representa un ejemplo de impunidad. “La senadora Chávez debería estar siendo investigada por delitos graves. Pero, en lugar de responder a los señalamientos, desvía la atención atacando a la oposición y a periodistas”, afirmó.
Cruce de acusaciones en el Senado
El enfrentamiento entre ambas legisladoras ocurrió luego de que Andrea Chávez usara la tribuna del Senado para denunciar una supuesta persecución política en su contra. La morenista defendió los convenios con el sector privado para llevar atención médica a zonas marginadas de Chihuahua y acusó a la gobernadora Maru Campos de oponerse a la colaboración con el gobierno federal en materia de salud.
Sin embargo, Téllez desestimó estos argumentos y aseguró que la iniciativa de Chávez no es más que un mecanismo de promoción política financiado con recursos públicos. Según la panista, la operación de estas unidades médicas costaría cerca de 10 millones de pesos al mes, dinero que supuestamente beneficiaría a una empresa vinculada con Morena.
Ataques a periodistas
Téllez también criticó a Chávez por utilizar su intervención en el Senado para descalificar al periodista Carlos Loret de Mola, quien dio a conocer la investigación sobre el presunto uso indebido de recursos. “En lugar de presentar pruebas de su inocencia, ataca a la prensa que revela la verdad”, señaló la senadora del PAN.
Finalmente, Téllez recordó que Chávez respaldó los recortes presupuestarios en salud impulsados por Morena y la acusó de intentar “lavarse las manos” con acciones que calificó como cínicas. “No se puede jugar con la salud de la gente para ganar popularidad rumbo a futuras elecciones”, concluyó.