En un amistoso preparatorio para la Copa América, Uruguay aplastó a un México alternativo con un contundente 0-4. Jaime Lozano, el técnico nacional, decidió experimentar con una alineación sin varios titulares, un riesgo que resultó en una humillación para el equipo tricolor. Este resultado no solo exhibe las deficiencias del plan de reestructuración de Lozano, sino que también pone en duda su permanencia al frente del equipo, un tema que los directivos deberán evaluar con urgencia.
El planteamiento de Lozano pretendía competir de tú a tú contra los orientales, pero en cuestión de minutos, el plan se vino abajo. Darwin Núñez aprovechó un rebote en la primera jugada ofensiva para abrir el marcador al minuto 6. Aunque el Piojo Alvarado respondió de inmediato mandando el balón al travesaño, el ritmo del partido siguió desfavorable para México. Uruguay se mostró superior y en el minuto 27, Brian Rodríguez sirvió para Facundo Pellestri, quien anotó el segundo gol. El Chino Huerta desperdició una oportunidad clara y, poco después, Núñez anotó el tercero al minuto 44 con un desborde y gol.
El segundo tiempo no trajo cambios tácticos por parte de Lozano, lo que permitió a Núñez completar su triplete al minuto 49 con el cuarto gol para Uruguay. Con una lluvia de cambios en ambas escuadras, el ritmo del partido bajó y la masacre terminó.
Este partido, que debió servir para afinar detalles, ha dejado más dudas que certezas sobre el futuro del equipo mexicano bajo la dirección de Jaime Lozano. El próximo partido contra Brasil se presenta ahora como un examen crucial; otro resultado adverso podría significar el final del proyecto de Lozano al frente del Tri.