CIUDAD DE MÉXICO.-
Este miércoles, durante la audiencia general que ofrece cada semana, el papa Francisco hizo referencia al informe que ayer se dio a conocer sobre los casos de abusos o violencia sexual contra menores o personas vulnerables que ocurrieron desde 1950 en Francia.
Se trata del informe de una comisión independiente sobre los abusos o violencia sexual contra menores y personas vulnerables, cometidos desde 1950 en adelante en la Iglesia en Francia.
Dolor y vergüenza
Durante su comparecencia, el santo padre expresó su tristeza y dolor a las víctimas, por el trauma sufrido.
“La vergüenza, nuestra vergüenza”, insistió el papa Francisco, por el hecho de que la Iglesia no las haya puesto en el centro de sus preocupaciones. A ellas, a las víctimas, les aseguró su oración.
“Y rezo, y rezamos todos juntos, a ti Señor la gloria, a nosotros la vergüenza, este es el momento de la vergüenza”, aseguró el obispo de Roma.
“Animo a los obispos y a los superiores religiosos a seguir haciendo todo lo posible para que dramas similares no se repitan”, dijo el sumo pontífice.
Y agregó, “expreso a los sacerdotes de Francia, mi cercanía y apoyo paternal ante esta prueba que es difícil pero saludable e invito a los católicos franceses a asumir sus responsabilidades para que la Iglesia sea una casa segura para todos”.
La investigación
En los últimos tres años, una comisión independiente realizó una investigación del fenómeno de los abusos en la iglesia francesa y que identificó a entre 2,900 y 3,200 religiosos pederastas, hubo al menos 330,000 casos de abusos o violencia sexual sobre menores o personas vulnerables desde el año 1950.
Por su parte, la oficina de prensa del Vaticano publicó una nota en referencia al informe, en la que el papa Francisco expresaba su “dolor” y en la que aseguraba que su pensamiento iba “ante todo a las víctimas, con gran dolor, por sus heridas, y agradecimiento, por su valentía en la denuncia.”
“Su pensamiento va ante todo a las víctimas, con gran dolor, por sus heridas, y agradecimiento, por su valentía en la denuncia, y a la Iglesia de Francia, porque, en la conciencia de esta terrible realidad, unida al sufrimiento del Señor por sus hijos más vulnerables, pueda embarcarse en un camino de redención“, se indicó en el comunicado.