WASHIGTON.
El Pentágono anunció ayer la creación de una unidad encargada de estudiar oficialmente objetos voladores no identificados, u ovnis, que se enfocará en detectar posibles maniobras de espionaje lideradas por adversarios de Estados Unidos.
Con la creación de la “célula de trabajo sobre fenómenos aéreos no identificados” aprobada el 4 de agosto y que estará a cargo de la Marina, se pretende “comprender mejor la naturaleza y origen” de estos fenómenos, dijo Susan Gough, portavoz del Departamento de Defensa, en un comunicado.
Para el Ejército estadunidense los “fenómenos aéreos no identificados” no tienen nada que ver con los potenciales hombres verdes, sino más bien con adversarios muy reales de Estados Unidos.
Washington está particularmente preocupado por las capacidades de espionaje de China, a través de drones u otros medios aéreos.
La misión de la nueva unidad del Pentágono es “detectar, analizar y catalogar estos fenómenos aéreos no identificados que podrían representar una amenaza para la seguridad nacional”, dijo la portavoz.
El Pentágono toma muy en serio cualquier incursión de aeronaves no autorizadas en nuestros centros de entrenamientos o en nuestro espacio aéreo, y revisa todos los informes”, agregó.
El Senado de Estados Unidos se interesó en las actividades del Pentágono en esta área en junio, confirmando así oficialmente la existencia de un grupo de trabajo informal sobre este tema.
La nueva unidad formaliza las operaciones de estos soldados y permitirá al Congreso monitorear más de cerca la actividad.
El Pentágono publicó tres videos tomados por pilotos de la Marina a fines de abril que muestran encuentros en vuelo con lo que parecen ser ovnis. Uno de estos videos, todo en blanco y negro, data de noviembre de 2004 y otros dos de enero de 2015.