En un Super Bowl 2025 lleno de expectativas, los Philadelphia Eagles hicieron historia al arrebatarle a los Kansas City Chiefs la posibilidad de convertirse en el primer equipo en lograr tres campeonatos consecutivos en la NFL. Con una actuación dominante, las Águilas se alzaron con su segundo título tras vencer por un contundente 40-22 en el Allegiant Stadium de Las Vegas.
Un inicio arrollador
Desde el primer silbatazo, los comandados por Jalen Hurts impusieron condiciones. Con una defensa implacable y una ofensiva precisa, Philadelphia dejó claro que no había margen para la historia que Kansas City soñaba. El primer cuarto terminó 7-0 a favor de los Eagles, y para el segundo cuarto el marcador ya mostraba una diferencia de 24-0. La defensa de los Chiefs, encabezada por Chris Jones, no pudo frenar a un Hurts inspirado que aprovechó cada oportunidad para aumentar la ventaja.
Mientras tanto, Patrick Mahomes, el astro de Kansas City, se mostró desorientado y sin soluciones ante la presión constante de los defensores rivales. Para el medio tiempo, la misión de remontar parecía imposible.
El golpe definitivo
El tercer cuarto selló el destino del partido. Los Eagles sumaron 10 puntos más y dejaron el marcador 34-0. La ofensiva de Kansas City seguía sin respuestas, y las tribunas ya comenzaban a anticipar el desenlace. Aunque los Chiefs reaccionaron en el último cuarto con 22 puntos, el daño ya estaba hecho. La contundencia de Filadelfia dejó el marcador final en 40-22.
Jalen Hurts, el héroe del día
Hurts se consolidó como el gran protagonista del encuentro, con pases certeros y liderazgo absoluto en el campo. A su destacada actuación se sumó la labor del cuerpo defensivo de los Eagles, que anuló por completo a una de las ofensivas más peligrosas de la NFL.
Fin de una era para Kansas City
La derrota deja a los Kansas City Chiefs con una dolorosa espina clavada, ya que el tricampeonato era una hazaña que los colocaría en la cúspide de la historia del fútbol americano. Para Mahomes y el entrenador Andy Reid, el resultado será una motivación para reconstruir y buscar un nuevo campeonato.
Por su parte, los Philadelphia Eagles sellan una temporada de ensueño, demostrando que el hambre de triunfo supera cualquier pronóstico. Hoy, Filadelfia vuelve a celebrar como rey indiscutible de la NFL.