Considerado tanto por su generación como por las que le siguen como un maestro de la comedia y el primer standupero de México, Polo Polo dejó un legado de carcajadas en el público, tanto en aquellos que lo escucharon a escondidas como en quienes pudieron verlo en vivo relatando sus largos chistes con doble sentido y en los que hizo gala de su manejo del albur. Ayer, el comediante murió a los 78 años de edad en su casa, de causas naturales, aunque padecía demencia vascular, según lo confirmó su hijo Paul García.
“Fue muerte natural. Finalmente falleció a las 5:15 de la mañana, dejó de respirar. (Sus últimos días) siempre estuvo arropado por la familia. Todo el tiempo mi hermana estuvo al pendiente de él, cumplieron lo que él siempre quiso, pues no quería entrar a una institución, sino que siempre lo cuidáramos nosotros. Mi hermana, la verdad, hizo un gran trabajo y todo el tiempo estuvo con él a su cuidado.
“Él tenía demencia vascular, tenía varios episodios de derrames y puede avanzar muy rápido o muy lento. Para un ser querido siempre (este avance) va a ser rápido, porque uno quisiera que (tu familiar) durara más tiempo.
“Yo estuve en su último respiro, estuve ahí con él; estuvimos los dos con él”, expresó Paul García a Ventaneando.
Su hijo recordó que su padre era distinto en su faceta en el escenario y en la convivencia con su familia.
“Era una persona seria, agradable y no decía muchas groserías, ése era su alter ego y algo que usaba para sus shows. No todo el mundo está trabajando todo el tiempo, igual mi papá. Era una persona seria, le gustaba mucho leer y la música. Usaba esa faceta para su trabajo”, acotó.
Destacó que tuvo dos hijos, pero que “era muy fiestero” y que se casó tres veces. Además, tuvo una faceta como empresario de zapatos, pues nació en una familia dedicada a esta actividad.
“La vida creo que es perfecta, porque al tener unos papás zapateros y tener que estar encargado de una fábrica en Peralvillo, pues con la misma gente que trabajaba, aprendió a alburear y la vida siempre va dando esas vueltas, y eso que él siempre quiso cantar. Tenía gracia con la guitarra y lo demás es historia”, dijo.
No dejó ningún proyecto inconcluso, aunque hace alrededor de siete años que se alejó de los escenarios para resguardar su salud, tras una gira del adiós.
“Todo lo que pudimos hacer con él se hizo, todo lo que quiso se pudo lograr y hasta sus últimas voluntades, que eran estar con nosotros y así fue”, destacó.
La velación se realizó ayer en la agencia funeraria de Gayosso Sullivan.
Leopoldo Roberto García Peláez Benítez, nombre real del comediante mejor conocido como Polo Polo, nació en León, Guanajuato, el 9 de marzo de 1944.
Su comedia, con gran auge en la década de 1980 y 1990, se caracterizó por hacer rutinas largas llenas de albures, referencias sexuales, doble sentido y lenguaje explícito, como si se tratara de anécdotas personales. Sin embargo, su personalidad fuera de escena contrastaba al ser un hombre de pocas palabras.
Grabó alrededor de 22 discos o cassettes con diferentes rutinas de comedia que especificaban que era contenido exclusivo para adultos, por el tipo de lenguaje y las referencias sexuales, pues sus historias ridiculizaban situaciones de la vida cotidiana y sexual, sin dar demasiada importancia a los chistes políticos o sociales.
Tales características fueron la semilla para muchos de los comediantes y standuperos actuales.
Tras presentarse en pequeños establecimientos para ofrecer sus shows de comedia, Polo Polo aumentó su popularidad ante el color de sus chistes y para 1976 se trasladó al club Keops Night Club, después en el Conjunto Marrakesh, el centro nocturno El Cantar de los Cantares y el Crown Hall del Hotel Crowne Plaza. Su primera aparición fuera de México fue en Estados Unidos en 1988 en el Chache Super Club de Hollywood, con presentaciones por diez días con teatro lleno. Al hacer un show nuevo cada año, se presentó además en otros escenarios de Las Vegas, California, Texas y Phoenix. En México, además, tuvo funciones en el Premier, El Patio, el Teatro Blanquita y el Teatro San Rafael, entre otros.
Su primer álbum se tituló El viaje a España, que, aunque tuvo poca difusión por los albures en su contenido, vendió más de cien mil copias.
Tras su éxito ante la gente, y sin ser actor, participó en las películas La lechería de Zacarías (1986), junto a Olivia Collins, César Bono, María Luisa Alcalá, Sergio Ramos El Comanche; Duro y pareja en la casita de pecado (1987), también con Olivia Collins, César Bono y Diana Ferreti; Sólo para adúlteros (1989), nuevamente con Collins, Sasha Montenegro, Carmen Salinas y Polo Ortín; Los relajados (1989), Investigador privado… muy privado (1990), con Felicia Mercado, Azela Robinson y María Luisa Alcalá, entre otras.
Además, fue parte de los programas Con ganas (1998), en el que fue conductor, ¿Qué nos pasa?, a finales de los años 90 junto a Héctor Suárez, Cuento de Navidad (1999), La escuelita VIP (2004) y La escuelita en Noche Buena (2004), producciones de Jorge Ortiz de Pinedo en los que compartió créditos con Luis de Alba, Chabelo, Roxana Martínez, Martha Ofelia Galindo, Lorena Herrera, Jorge Muñiz, Mauricio Herrera, Raúl Padilla Chóforo, Galilea Montijo, Isabel Madow, Rafael Inclán y Luz Elena González, entre otros; y Crónicas chilangas (2009).
En 2010 lanzó El show de Polo Polo: Reca(r)gado, que estuvo disponible en cines.
En su cuenta de Twitter, se puede leer: “Palabras más, palabras menos, simplemente alguien que hizo de la risa un modo de vida”.
Reacciones en redes sociales
Jorge Ortiz de Pinedo
“¡Me embarga la tristeza, ha muerto Polo Polo, se cierra un capítulo memorable de la Comedia Mexicana! Él inmortalizó el Bar Keops, de la Zona Rosa; El Cuevón, de Escenaria; y quién no rio a carcajadas con los discos de este genial comediante. Por amistad y cariño, me hizo el honor de participar en La Escuelita VIP, junto con Chabelo, Coque Muñiz, Mauricio Herrera, Luis de Alba, Carlitos Espejel y demás camaradas. Impuso moda, estilo y formas de hacer humor con su personal manera de contar sus chistes y sus historias. Me honró con su amistad y tiene mi admiración eterna. ¡Mi querido Polito, de seguro ahora estarás contando chistes, haciendo reír a los mismísimos ángeles…!
Aunque estoy fuera del país, mi corazón está con su familia, sus amigos y sus millones de fans.”
Xavier López Chabelo
“Qué afortunado de haber compartido tanta vida juntos. Te vamos a extrañar siempre. Un aplauso para el gran Polo Polo.”
Franco Escamilla
“El rey ha muerto, el mundo se ha vuelto un lugar menos gracioso y con menos magia. Nadie nunca igualará al maestro Polo Polo QEPD. Un Marlboro rojo y un “cognaquito” a la salud del mejor de todos los tiempos.”
Adal Ramones
“Hay maestros en la vida de cada uno de nosotros. Se fue uno de los pocos grandes a quienes responsabilizo de abrazar este delicioso juego de la comedia. Mis condolencias a toda la familia y amigos del gigante Polo Polo.”
Jorge Muñiz
“Un pequeño homenaje. Adiós querido amigo.”
Mauricio Castillo
“Falleció uno de los mejores comediantes de estos tiempos. Nadie contaba los chistes como él. Era enorme. Polo Polo te vamos a extrañar. Nos harás mucha falta. Descansa en Paz.”
Eduardo España
“Q.E.P.D. el gran Polo Polo. Su simpatía y talento para el humor nos regalaron años maravillosos de risas. Mis condolencias para sus seres queridos.”
Adrián Uribe
“Habrá muchas risas en el cielo.”
René Franco
Querido maestro, enorme Polo Polo. Gracias. A tu familia, amigos y tu público, que haya risas en tu honor. Me quedo con el recuerdo de esa noche feliz en los lugares que se bautizaron en tu honor.”
Freddy Ortega
“Lamentable el fallecimiento del maestro del stand up en este país… el gran Polo Polo.”