Con una cinta de precaución se acordonó la banqueta para marcar la distancia y continuamente personal médico sale a nombrar a familiares de personas hospitalizadas a causa del coronavirus o para dar el paso al siguiente de la lista que se hará la prueba de Covid-19.
El desorden se generó cuando los derechohabientes se aglomeraron a los alrededores de la puerta a reclamar que no se estaba respetando la lista de espera. A pesar de las indicaciones, tanto el personal médico como de seguridad se vio rebasado. Mientras más se aglomeran más personas llegan a preguntar qué requisitos necesitan o dónde había que apuntarse para hacerse la prueba.
Al otro lado de la calle estaba don Alfredo esperando a su hijo, comenta que desde el martes en la mañana acudió para que le hicieran la prueba, pero fue hasta la mañana del miércoles cuando se la pudieron realizar.
“Batallamos mucho, desde las 9:00 de la mañana del martes venimos, estuvimos hasta las tres, regresamos en la noche porque a mí hijo le piden ese papel en el trabajo, le dijeron que viniera al día siguiente en la mañana, aquí estamos esperando los resultados ya”, comentó.
Rosalidia, también acudió al seguro a realizarse la prueba, pues su esposo, su hijo y su nuera salieron positivos. A pesar de que no ha tenido los síntomas quiere asegurarse de que no tiene el virus ya que ella está al cuidado de su pequeña hija y de su nieta.
“Vine a hacerme la prueba porque tengo a mi hijo, a mi esposo y a mi nuera con covid-19. Ahorita estoy esperando los resultados a mí me anotaron desde antier, te tienes que anotar un día antes o llegar bien tempranito para poderte anotar y ser de las primeras porque creo nada más pasan 60 personas y son un montón. Es Mucha, angustia, miedo y desesperación”, expresó.
Fernando tiene a su madre de 69 años de edad internada, señala que enfermeras el han dicho que están saturados, que no hay camas y que incluso están acomodando a las personas en los pasillos.
“Tenemos apenas dos días que la internamos, pero se ve que si está saturado porque ahí en la entradita estaba diciendo una enfermera, que si estaba lleno, que no había donde más poner a la gente y que la tenían en los pasillos, que según no hay camas dicen”, señaló.
Doña Alejandra también tiene a su esposo internado, aunque dice que él salió negativo en la prueba lo mandaron para esa sección ya que está enfermo de los pulmones.
“Tengo a mi esposo aquí, ayer me lo mandaron para acá de urgencias, le hicieron la prueba del Covid-19 salió negativa, pero él está malo de los pulmones, del corazón, sabemos que él no está bien que en cualquier momento puede faltar y lo mandaron para acá por eso”, dijo.
Un comerciante del lugar añadió que desde el lunes hay mucha gente esperando para hacerse la prueba, incluso algunos tienen más de 24 horas y han pasado la noche ahí para no perder su lugar, y conforme pana los días más saturado y aglomerado se ve.