DURANGO, DGO.
Considerado como un creciente problema de salud pública, el suicidio es un fenómeno que se presenta como resultado de una combinación de diversas problemáticas sociales, medioambientales y biológicas que está rodeado de estigma, prejuicios y mitos; por ello es importante fomentar la información de fuentes confiables y así afrontar el desconocimiento que rodea al tema, consideró la directora del Instituto de Salud Mental del Estado de Durango (ISMED), María Soledad Ruiz Canaán.
Explicó, que los temas de salud mental continúan siendo un reto para la sociedad en general por lo que es importante reconocer señales de riesgo en personas que nos rodean, como lo es el inicio repentino o incremento de uso de alcohol o sustancias nocivas, la búsqueda de materiales u objetos que puedan ser posibles métodos de autolesión, actuar temerariamente ante situaciones de riesgo, aislamiento, hablar sobre el deseo de morir, mostrar desesperanza, entre otros.
La funcionaria estatal, dio a conocer que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que por cada suicidio consumado, existen alrededor de 20 intentos, la mayor parte de estos no pueden ser registrados ni atendidos por las instituciones de salud debido a que suelen mantenerse como secreto ya sea por la persona que lo intentó o por sus familias, principalmente por temor a recibir señalamientos “a diferencia de otras afecciones o enfermedades, cuando se habla de una persona que está sufriendo de un trastorno de salud mental o ha intentado hacerse daño a sí misma, suele haber una posición de rechazo por parte de las personas que rodean al afectado; es común ver poco o nulo apoyo ante estas situaciones y en el peor de los casos indiferencia, lo cual dificulta que esa persona piense siquiera en buscar ayuda profesional”, enfatizó.
Soledad Ruiz Canaán coincidió que una de las partes más importantes para favorecer la prevención del suicidio y de acuerdo a los más importantes organismos y asociaciones internacionales especializadas en el tema, es reforzar los trabajos de psicoeducación con la población en general para que puedan conocer factores protectores y de riesgo, fomentar la salud mental positiva y capacitar a personal del primer nivel de atención, medidas que pueden ser ampliamente efectivas tanto para el autocuidado, el diagnóstico oportuno de trastornos mentales así como para la detección del riesgo suicida.
Finalmente, explicó que en congruencia con las funciones del instituto que está a su cargo, durante el 2020 se realizaron un total de 71 actividades de promoción y capacitación, tanto virtuales así como presenciales sobre dicho tema y durante el 2021 se reforzarán estas acciones con la finalidad de hacer frente a esta problemática.