PEKÍN.
Los visitantes extranjeros expresaron indignación por las pruebas de frotis anal que hace China para covid-19, lo que provocó quejas, traumas sicológicos y avivó el debate sobre su necesidad.
Algunas ciudades, como la capital, Pekín, Shanghái y la ciudad portuaria de Qingdao, exigen los controles, además de las pruebas de frotis nasal o faríngeo, para algunas llegadas internacionales, dicen los medios estatales.
El Centro Chino para el Control de Enfermedades dice que la prueba se realiza con un hisopo de algodón estéril, que se inserta de 3 a 5 cm en el ano antes de ser rotado suavemente hacia afuera.
Tales pruebas pueden garantizar que se identifiquen infecciones, ya que los rastros de coronavirus pueden detectarse en el ano durante más tiempo que en el tracto respiratorio, dijeron algunos médicos chinos a medios estatales.
Pero un resultado positivo no significa necesariamente que la persona examinada pueda propagar el virus, ya que los rastros inactivos que no pueden replicarse o infectar a otros también pueden ser positivos, advirtió Jin Dongyan, profesor de virología de la Universidad de Hong Kong.