El precio de la carne de res ha registrado un incremento significativo en los últimos tres meses, al aumentar en promedio 40 pesos por kilo. Actualmente, este producto básico se comercializa entre 190 y 280 pesos el kilo, dependiendo del corte y el punto de venta, lo que ha generado preocupación entre consumidores y comerciantes.
Durante un recorrido realizado por distintos mercados públicos de la capital, se constató que, si bien en lugares como La Merced el bistec de res aún se consigue a precios relativamente más bajos, el alza ha sido notoria. En enero, este corte costaba alrededor de 150 pesos por kilo, mientras que hoy se vende a 190 pesos. En el mercado de Jamaica, el aumento fue de 190 a 225 pesos por kilo en el mismo periodo.
Comerciantes consultados señalaron que esta alza ha impactado directamente en las ventas, las cuales han caído hasta en un 50 por ciento. “La gente ya no compra por kilo, ahora pide por pieza o por gramos”, comentó Alejandro Fabres, del local El Famoso 56, en el mercado de Jamaica. Añadió que varios locatarios han reducido hasta un 30 por ciento sus compras a proveedores para evitar pérdidas e invertir en productos de mayor demanda, como carne de cerdo o pollo.
Uno de los principales factores que ha detonado esta situación, de acuerdo con los propios comerciantes, es la sequía que afecta a estados ganaderos como San Luis Potosí, así como la presencia del gusano barrenador, una plaga que daña gravemente al ganado y obliga a los ganaderos a sacrificar animales, encareciendo la producción. Este problema también se ha detectado en regiones de Michoacán, Veracruz y Estados Unidos, lo que ha contribuido a una menor oferta y un mayor costo.
En carnicerías de la ciudad, como las ubicadas en Xocongo 235, colonia Tránsito, el precio del kilo de bistec de sirloin subió de 240 a 280 pesos. En contraste, el bistec de cerdo se mantiene en alrededor de 170 pesos, por lo que muchos clientes optan por esta alternativa.
Amas de casa entrevistadas expresaron su preocupación. “Ahora hay que hacer rendir más el dinero y ser creativos en la cocina”, dijo María, vecina de la zona centro. Karla, madre de familia, comentó: “Tengo niños pequeños y creo que la proteína animal es importante, pero ya no se puede comprar igual que antes”.
Pese a la crisis, algunos locatarios afirmaron que el precio de la carne se ha mantenido estable en las últimas dos semanas, y confían en que, tras la temporada de Semana Santa, los costos comiencen a bajar.