Oaxaca, Oax.– Catorce personas que viajaban desde la ciudad de Oaxaca hacia Puerto Escondido desaparecieron el pasado 7 de enero mientras se desplazaban por la nueva carretera Oaxaca-Costa, una ruta que conecta los Valles Centrales con la región costera. La noticia ha generado preocupación entre sus familiares y movilizó a las autoridades locales, aunque hasta el momento se reportan pocos avances en su localización.
El grupo, compuesto en su mayoría por jóvenes de entre 17 y 19 años, partió en varias camionetas con destino recreativo hacia Puerto Escondido. Según testimonios, la última comunicación con ellos fue una llamada desde Río Grande, en la zona costera, realizada la noche de su desaparición. Desde entonces, no se ha tenido más información sobre su paradero.
Entre los desaparecidos, según fichas de búsqueda difundidas en redes sociales, se encuentran Yurem de Jesús Barrios Martínez, Yair Morales Matías, Rafael Velasco Hernández, Julio Alberto Quiroz González, José Miguel Vásquez Rodríguez y Luis Alberto Contreras Zúñiga, quien conducía una de las camionetas. Los familiares han proporcionado detalles físicos y descripciones de las prendas que portaban los jóvenes al momento de su desaparición.
La nueva carretera Oaxaca-Costa, que reduce el tiempo de traslado entre Oaxaca y la costa a dos horas y media, ha sido señalada en ocasiones por incidentes de inseguridad. A pesar de ser una opción popular entre turistas y locales, las familias de los desaparecidos denuncian que el trayecto carece de una vigilancia adecuada para garantizar la seguridad de quienes la transitan.
El Fiscal General del Estado, Bernardo Rodríguez Alamilla, confirmó en conferencia de prensa que, hasta ahora, únicamente se han recibido dos denuncias formales relacionadas con la desaparición del grupo, a pesar de que en redes sociales se reportan 14 personas desaparecidas. «De manera directa, solo tenemos dos denuncias formales que coinciden con el periodo de desaparición», declaró el fiscal.
Durante la conferencia matutina del gobernador Salomón Jara, el fiscal informó que las autoridades han activado a la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas y No Localizadas (DNOL) para investigar los casos. Sin embargo, reconoció que aún no se cuenta con líneas claras de investigación o avances significativos.
Familiares de los desaparecidos han denunciado intentos de extorsión por parte de personas ajenas al caso, quienes solicitan dinero a cambio de información falsa sobre el paradero de sus seres queridos. “Esto solo aumenta nuestra desesperación y dolor”, comentaron al medio Diario de Morelos.
Los jóvenes desaparecidos portaban características y accesorios distintivos que podrían ayudar a identificarlos. Por ejemplo, Yair Morales Matías tiene tatuajes notables, como una Santa Muerte en el antebrazo izquierdo y la leyenda “Alexandra Matías y Salvador” en la mano derecha. Luis Alberto Contreras Zúñiga, conductor de una de las camionetas, llevaba una camisa negra con estampados y es reconocido por tatuajes como el ojo de Horus en la pantorrilla izquierda y símbolos aztecas en el antebrazo derecho.
Los familiares han solicitado de manera urgente que las autoridades intensifiquen las labores de búsqueda, mientras que colectivos sociales y organizaciones locales han comenzado a difundir las fichas de búsqueda para alertar a la población. Asimismo, hacen un llamado a garantizar la seguridad en las carreteras de la región, que han sido escenario de numerosos incidentes en los últimos meses.
La desaparición ocurre en un contexto de creciente inseguridad en Oaxaca. Los recientes incidentes en la región, como enfrentamientos y bloqueos, han generado preocupación entre los habitantes y han impactado la percepción de seguridad, particularmente en zonas turísticas como Puerto Escondido, uno de los destinos más concurridos del estado.