La cantante colombiana Shakira anunció el aplazamiento de su concierto en el SoFi Stadium, previsto originalmente para el 20 de junio, como respuesta directa a las crecientes protestas contra las redadas migratorias llevadas a cabo por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en el sur de California.
En un comunicado emitido por su equipo, Shakira señaló que la decisión fue tomada por respeto y empatía hacia las comunidades migrantes que atraviesan momentos de tensión y temor: “No puedo celebrar la música en una ciudad donde muchas familias viven con miedo. Mi show debe estar en sintonía con los valores de humanidad, inclusión y dignidad que defiendo.”
Contexto de tensión social
Durante las últimas semanas, organizaciones defensoras de derechos humanos han denunciado un aumento significativo en las redadas del ICE en zonas urbanas y suburbanas de Los Ángeles. Esto ha generado manifestaciones masivas, bloqueos de avenidas y vigilias nocturnas en distintos puntos de la ciudad. Diversas figuras públicas como Pedro Pascal, Kim Kardashian y Mark Ruffalo también han alzado la voz en contra de estas acciones, considerándolas “crueles e inhumanas”.
La gira de Shakira, Las mujeres ya no lloran, ya había sufrido otros cambios recientes, incluyendo la reprogramación de fechas en Boston y Washington, D.C., por razones logísticas. Sin embargo, el caso de Los Ángeles marca la primera vez que un concierto es pospuesto explícitamente por motivos sociales y políticos.
Reprogramación y respuesta del público
El concierto ha sido reprogramado para el 4 de agosto, y los boletos adquiridos seguirán siendo válidos para la nueva fecha. La promotora Live Nation informó que debido a la alta demanda, se evalúa abrir una segunda fecha en la ciudad.
En redes sociales, la decisión de la artista ha generado una ola de apoyo. Usuarios aplauden su postura comprometida, destacando que su carrera siempre ha estado ligada a causas sociales, desde la educación infantil hasta los derechos de los migrantes.
Una postura política en el escenario musical
Shakira no es ajena al activismo. En recientes entrevistas, expresó su preocupación por la criminalización de los inmigrantes en Estados Unidos: “Ser inmigrante aquí significa vivir en la incertidumbre, muchas veces en silencio. Yo no puedo guardar silencio ante eso.”
La artista ha reforzado su papel como figura pública con conciencia social, dejando claro que su música no es ajena al contexto en el que resuena.