El político y empresario Manuel Espino, militante de Morena, lanzó una contundente crítica al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, por la creciente violencia en el estado. A través de su cuenta en la red social X, Espino expresó que el mandatario estatal ha sido “rebasado por la realidad” y le espetó la frase: “Si no pueden, renuncien.”
Sinaloa en crisis
Espino señaló que la entidad enfrenta un escenario de caos marcado por asesinatos, despojo de vehículos, levantones y ataques a viviendas y negocios. “Negar esto sería absurdo”, afirmó, al tiempo que acusó a Rocha de hacer “oídos sordos” a las súplicas de los habitantes por recuperar la seguridad en sus comunidades.
El aumento de la violencia en Sinaloa ha sido atribuido a la disputa entre los grupos conocidos como “Chapitos” y “Mayitos” por el control del Cártel de Sinaloa, según reconoció el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, quien recientemente acudió a la entidad para supervisar estrategias de pacificación.
La respuesta de García Harfuch
El titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana aseguró que su prioridad es devolver la tranquilidad a la población. “Estamos aquí para trabajar en coordinación con el gobierno estatal y atender las preocupaciones legítimas de la ciudadanía”, afirmó García Harfuch. Su presencia en Sinaloa ha sido interpretada por analistas como un respaldo político al gobernador Rocha Moya en medio de la crisis.
Críticas internas en Morena
La declaración de Espino evidencia tensiones internas en Morena, donde algunos actores comienzan a cuestionar la gestión de gobernadores emanados de sus filas. Aunque el empresario aseguró que respeta a Rocha como compañero de partido, su mensaje público subraya una falta de confianza en la capacidad del mandatario para manejar la inseguridad.
Un llamado a la acción
La crítica de Espino refleja el descontento social ante la violencia que ha escalado en Sinaloa y pone en el centro del debate la efectividad de las estrategias de seguridad tanto a nivel estatal como federal. Por ahora, el gobernador Rocha no ha respondido a los señalamientos, pero el llamado de Espino deja claro que la presión sobre su administración no solo viene de la oposición, sino también desde su propio partido.