En una polémica declaración durante una entrevista con NBC, el expresidente y actual candidato republicano Donald Trump aseguró que Estados Unidos “subsidia” económicamente a México y Canadá, sugiriendo que ambos países deberían convertirse en los estados 51 y 52 de la Unión Americana.
“Estamos enviando cientos de billones de dólares a nuestros vecinos del norte y del sur. Si vamos a subvencionarlos, que se conviertan en estados”, dijo Trump, refiriéndose a lo que considera un desequilibrio económico en las relaciones comerciales de Estados Unidos con sus países fronterizos.
Trump argumentó que estas “subvenciones” son parte de una política que, según él, coloca a Estados Unidos en desventaja frente a otros países. En el caso de Canadá, afirmó que su país destina más de 100 billones de dólares al año, mientras que México recibiría cerca de 300 billones, cifras que expertos han señalado como exageradas y sin base comprobable.
El republicano reiteró que los aranceles son la solución clave para reequilibrar la economía estadounidense. “Los aranceles son la palabra más hermosa. Nos harán ricos”, afirmó, rememorando sus políticas previas a la pandemia de COVID-19, cuando impulsó gravámenes a productos chinos y de otros países como una estrategia de presión comercial.
La propuesta de anexar a México y Canadá, aunque no pasó desapercibida, fue vista por analistas como una estrategia retórica para captar atención mediática y consolidar su base política, apelando al nacionalismo económico que ha sido un eje central de su discurso.
Por otro lado, las declaraciones han generado rechazo en redes sociales y entre expertos, quienes consideran la idea irrealizable tanto política como jurídicamente. “Es una muestra más de las declaraciones hiperbólicas de Trump”, señaló el analista político Richard Haass, quien subrayó que convertir a dos naciones soberanas en estados requeriría un consenso casi imposible tanto en los países involucrados como en el Congreso estadounidense.
Las relaciones comerciales entre Estados Unidos, México y Canadá se rigen por el acuerdo T-MEC, firmado en 2020, que establece un marco de intercambio basado en la cooperación y la libre competencia. Sin embargo, Trump ha criticado en repetidas ocasiones el tratado, calificándolo como “insuficiente” para proteger los intereses de su país.
Aunque la propuesta de anexión carece de viabilidad práctica, el comentario deja entrever las prioridades de Trump para su campaña de 2024: un regreso a las políticas proteccionistas y el fortalecimiento de la economía estadounidense a través de medidas unilaterales.