Lo que parecía ser una simple visita turística terminó en escándalo cultural. Un turista rompió accidentalmente una escultura de alto valor artístico inspirada en Vincent van Gogh, al confundirla con una silla funcional en el prestigioso museo Palazzo Maffei Casa Museo de Verona. La obra, del artista contemporáneo italiano Nicola Bolla, estaba íntegramente cubierta con cristales de Swarovski y era parte central de la muestra.
📸 Una selfie que salió cara
El incidente ocurrió cuando una pareja decidió fotografiarse junto a la llamativa pieza, sin percatarse de que era una obra de arte y no un asiento real. Según registros de seguridad, mientras la mujer posaba junto a la silla, el hombre se sentó sobre ella, provocando su colapso inmediato. Ambos turistas se retiraron rápidamente del lugar tras el accidente.
“Es la peor pesadilla para cualquier institución cultural”, lamentó Vanessa Carlon, directora del museo. “Estamos ante una falta de sensibilidad hacia el arte y el espacio que lo contiene”.
🎨 Una obra de arte, no de descanso
La silla, que evoca el mobiliario retratado por Van Gogh en sus autorretratos en Arlés, es una reinterpretación contemporánea. Nicola Bolla utilizó miles de cristales de Swarovski para crear una pieza que simboliza la fragilidad y el valor de la belleza. Su propósito era puramente contemplativo, no funcional.
🔧 Daños reparables, pero lección costosa
Afortunadamente, el equipo de restauración del museo logró recuperar la obra tras varias horas de trabajo minucioso. Aunque el daño fue considerable, la estructura fue estabilizada y el revestimiento de cristales reparado.
El museo ha optado por no presentar cargos por el momento, aunque no se descarta una demanda civil. La dirección se comprometió a reforzar las medidas de seguridad y señalización en las salas.
“No solo queremos proteger el arte, también educar sobre cómo interactuar con él”, afirmó Carlon.