Un insólito y alarmante episodio se vivió recientemente en Tijuana cuando una joven pasajera olvidó su teléfono celular dentro de un taxi de la plataforma Uber. La situación, que podría haber tenido una resolución simple, se tornó dramática cuando el conductor del vehículo no respondió a los intentos de contacto para devolver el dispositivo.
Preocupada por la falta de respuesta del conductor, la chica y sus amigos decidieron rastrear el celular utilizando el sistema GPS. Localizaron el teléfono, pero lo que sucedió después dejó a todos atónitos. Al confrontar al taxista para recuperar el dispositivo, este reaccionó de manera inesperada y violenta, arrojando el celular a la calle sin previo aviso.
El incidente ha generado un amplio debate en las redes sociales sobre la responsabilidad y seguridad en los servicios de transporte por aplicación. Usuarios expresaron su indignación y preocupación, llamando a Uber a tomar medidas más estrictas con sus conductores para evitar situaciones similares en el futuro.
Este suceso pone en el centro de atención la importancia de la confianza entre usuarios y prestadores de servicios en plataformas digitales, y resalta la necesidad de protocolos claros y efectivos para resolver estos inconvenientes de manera segura y profesional.