La hinchazón del estómago es una patología leve, por lo tanto la persona no debe temer por su salud ya que es algo que se presenta por comer en exceso o consumir alimentos con gases. También conocida como distensión abdominal o vientre inflamado, en algunos casos esta patología puede presentar síntomas que adviertan sobre un problema más grave de lo esperado, debido a que la inflamación puede estar acompañada de otras señales.
Habitualmente, la hinchazón en el estómago no suele ser razón alguna para preocuparse, debido a que principalmente puede ser una mala alimentación, un problema en la zona de los intestinos o una intolerancia a algunos productos. A esto le podemos sumar la situación emocional del individuo ya que podría presentar este problema cuando este estresado, o también en el periodo menstrual.
El inconveniente se refleja cuando la zona del estómago es más grande de lo normal, causando temor en la persona afectada. En este sentido también es importante conocer otro de los orígenes, además de los mencionados anteriormente, que puede estar vinculado a un hábito nervioso como la deglución del aire, como así también intolerancia a la lactosa, aumento de peso y embarazo.
Por lo tanto, en este sentido, es menester comprender que dependiendo de los síntomas, puede ser que la hinchazón en el estómago sea algo grave para la salud de la persona afectada o un imprevisto pasajero. Por lo tanto, si las molestias perduran en el tiempo y se presentan otras alarmas, será necesario acudir con hospital, siempre que las señales sean las siguientes 5: pérdida abrupta del peso, fatiga, modificaciones en los hábitos para asistir al baño, inflamación frecuente y notables cambios en el apetito.
En este contexto, si se presentan los mencionados síntomas acompañado de la hinchazón en el estómago, podremos padecer drásticas consecuencias de salud tales como síndrome de intestino irritable y enfermedad inflamatoria intestinal como enfermedad de Crohn, como así también intolerancia a la comida y giardiasis (patología diarreica).