La reapertura de los puentes fronterizos a viajeros no esenciales, de México a Estados Unidos, aún está indefinida, señaló el canciller mexicano Marcelo Ebrard Casaubón, en entrevista con El Diario de El Paso.
El titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) enfatizó el incremento en los casos de Covid-19 –en particular la variante Delta– en Estados Unidos.
“Todavía no sabemos cuándo se podrán abrir las fronteras, no depende de mí”, dijo el diplomático mexicano sobre alguna fecha tentativa para permitir el cruce internacional a ciudadanos mexicanos con visa de turista a territorio estadounidense.
Ebrard se dijo ajeno a la decisión de reapertura –promovida por el Gobierno de EU–, después de acompañar en El Paso, Texas a familiares de las víctimas de la tragedia del 3 de agosto en esta ciudad.
“Todavía no sabemos (cuándo se podrán abrir las fronteras) ya que ha subido mucho el contagio, aunque nosotros (en México) ya casi terminamos la vacunación de nuestro lado, apenas se dio a conocer en México que el promedio de vacunación es muy alto”, sostuvo el funcionario mexicano.
En Juárez, el número de adultos de 18 años o mayores que cuentan con alguna vacuna supera el 80 por ciento. Una de las condiciones impuestas por la administración Biden para permitir el cruce de turistas mexicanos es que el porcentaje de vacunados en la frontera Norte de México llegue a niveles de inmunidad colectiva.
Durante su visita a esta frontera, el canciller se dio tiempo para comentar la situación que priva en la zona fronteriza a raíz de la emergencia sanitaria que provocó la pandemia.
El cierre de la frontera común entre ambos países ya se ha extendido por más de 16 meses, lo que continúa afectando la vida cotidiana y la actividad comercial entre ambas naciones.
En el más reciente comunicado oficial, el 21 de agosto del 2021 se presenta como la fecha tentativa para abrir las fronteras, aunque las condiciones de la pandemia han mostrado datos desalentadores a este respecto.
Ebrard Casaubón fue enfático al afirmar que la decisión de reabrir las fronteras no compete al Gobierno mexicano, sino a su contraparte de los Estados Unidos.
“No depende de mí, si por mí fuera no la cerraría (la frontera), porque se afecta mucho a la economía, de hecho en todos aspectos es mucho problema”, sostuvo.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México ha señalado que acatará la decisión de las autoridades de los Estados Unidos para mantener el cierre de la frontera a cruces no esenciales.
“El Gobierno de Estados Unidos nos ha informado sobre la decisión de extender el cierre parcial de la frontera un mes más”, indicó la SRE en su cuenta oficial de Twitter.
“México continuará con el diálogo bilateral y reitera que el ritmo acelerado de vacunación contra Covid-19 en la frontera genera condiciones para avanzar en mutuo beneficio”, confirmó la Cancillería.
La frontera terrestre de México hacia Estados Unidos ha estado cerrada al tráfico no esencial desde el 21 de marzo del 2020. Sólo se permite el paso en auto o a pie a ciudadanos o residentes legales de Estados Unidos, pero no a personas con visa de turista.