DURANGO, DGO.
El agua en la ciudad no será infinita y llegará a un punto en el que se tengan consecuencias debido al racionamiento o el uso que tenemos las personas con ella. Estamos en una situación real, no es una situación ficticia, ni una situación que pudiera llegar a suceder dentro de 400 años, el riesgo es que tal vez en dos o tres años el agua tenga que racionarse seriamente en la ciudad de Durango, en el que algunas colonias solo puedan tener agua 1 o 2 días a la semana.
A esta situación se ha llegado porque desde hace décadas la ciudad de Durango viene consumiendo más agua de la que permite la capacidad de recarga, durante siglos la ciudad permaneció sin ningún problema porque el crecimiento de la población era muy pequeño y había una cantidad suficiente en el subsuelo que permitía la recarga con las pocas lluvias que hay en la ciudad y no había ningún problema, el subsidio de agua de la ciudad era a partir del ojo de agua y de ahí se suministraba agua para toda la ciudad, lo cual era más que suficiente, sin embargo, los mantos friáticos han ido bajando, se han ido disminuyendo de manera muy rápida, por lo que desde 1956 la ciudad se encuentra en una veda de agua , lo que quiere decir que desde ese año no se tiene permitido perforar nuevos pozos.
Esta veda no ha sido suficiente para que recapacitemos y para que hagamos un uso racional del agua, siguen disminuyendo los mantos friáticos por lo que al día de hoy estos mantos disminuyen a un ritmo de 27 cm por año, por lo tanto, cada año tenemos menos agua en el subsuelo, pozos de los que se obtenían 80 litros de agua por segundo se están obteniendo solo 30 o 40 litros por segundo hasta el punto que se ha tenido que parar la extracción en algunos pozos porque no se obtiene lo redituable.
El punto número uno para que esto suceda es la falta de conciencia de la población, no nada más el sector privado sino quienes también han tenido que administrar la misma ya que esto se ha llegado a tomar como botín político. Aunado a esto los desperdicios por el uso excesivo del agua, ya que en Durango se tiene un consumo de 350 litros de agua al día por habitante cuando deberían ser solo 200, mientras que Europa se consumen solo 150 litros por habitante lo que quiere decir que estamos consumiendo 3 veces más de lo que deberíamos.
En segundo lugar, las políticas federales han influido en esta situación porque no se considera el agua un tema central o estratégico en el cual se deba de invertir, por ejemplo, para este 2020 en materia de recursos federales solo se invertirá un 10% a comparación de lo que se invirtió en el 2016, y según un estudio de la ONU por cada peso que se deja de invertir en este tema se gastan 23 pesos en el sector salud, que debido a esta pandemia está muy golpeado.
Esto también es una cuestión geológica y climatológica ya que la mayoría de las poblaciones se establecen cerca de algún cauce de agua como ríos o el mar, pero Durango no, Durango se estableció al lado de un monte que se pensaba era de plata, en Durango solo llueve algunos meses al año por lo que no hay oportunidad de filtración, ni tampoco oportunidad de recarga friática lo que ha hecho que la situación de falta de agua se esté acelerando.
En Durango se están tratando al 100% las aguas residuales siendo una de las únicas o pocas ciudades del país que hace esto ya que en otros lugares como Tijuana en la que grandes cantidades de agua las arrojan al mar, lo cual ha estado generando consecuencias en el tema de salud y el deterioro ambiental.
El día en el que el agua falte en nuestras colonias o fraccionamientos vamos a buscar culpables y a tratar de encontrar situaciones de origen, pero ya será demasiado tarde, el agua no es un recurso renovable a corto plazo. Muchos de estos factores aún estamos a tiempo de revertirlos, pero depende fundamentalmente de voluntad, de parte de la autoridad, pero sobre todo de la ciudadanía en tratar de racionar el agua de forma correcta y dejar de desperdiciarla.